Hace un tiempo cursé el Programa “Eficacia en la Productividad Personal”, de LMI (Leadership Management International).
Aprendí mucho. Un programa totalmente práctico que transforma tu manera de trabajar… y de vivir.
Te ayuda a mejorar tu rendimiento y a aumentar tu productividad.
¿Qué es LMI International?
Leadership Management International es una empresa global con más de 50 años de experiencia, que se dedica al desarrollo del liderazgo y la productividad en las personas y organizaciones de más de 80 países.
Actualmente soy consultor asociado a LMI Spain.
Imparto a directivos, mandos intermedios y emprendedores este programa y otros, destinados a mejorar su rendimiento y aumentar su productividad.
¿Por qué este programa?
Vivimos con agendas llenas, interrupciones constantes y sensación de no llegar a todo.
Este programa te enseña a recuperar el control de tu tiempo, enfocarte en lo importante y lograr resultados sostenibles.
A través de un método contrastado, aprenderás a:
Fijar metas claras y alcanzables.
Establecer prioridades.
Identificar y utilizar actividades de máxima rentabilidad.
Aprender a trabajar por bloques ininterrumpidos de tiempo.
Desarrollar otros hábitos de alta productividad…
¿Cómo lo conseguirás?
Aplicando la metodología LMI:
Repetición espaciada (aprendizaje continuo).
Aplicación práctica cada semana.
Reflexión y acción guiadas.
Acompañamiento y seguimiento personalizado.
Los pilares del programa:
La fijación de metas.
La gestión del tiempo y las prioridades.
La comunicación eficaz en la empresa.
El empoderamiento y la delegación.
Aumentar la productividad en los equipos de trabajo.
El impacto de este programa en ti y en tu equipo:
Mayor foco y claridad.
Más equilibrio entre vida y trabajo.
Harás lo mismo en menos tiempo o más en el mismo tiempo.
Equipos más autónomos, productivos y comprometidos.
Lo que hace diferente a “Eficacia en la Productividad Personal” es que no es una formación teórica que se escucha y se olvida. Es un programa que se vive, que se practica semana a semana, y que genera cambios reales y sostenibles en los hábitos de trabajo.
Las sesiones combinan reflexión, práctica y seguimiento, lo que permite que cada participante aplique de inmediato lo aprendido a su realidad profesional. No es un curso de “más información”, sino de más transformación.
Muchos profesionales sienten hoy que trabajan mucho… pero no avanzan. Viven en un modo de urgencia constante, apagando fuegos, saltando de tarea en tarea. Este programa les permite romper ese ciclo, reorganizar su forma de trabajar y recuperar la sensación de control.
Los fundamentos: metas, foco y acción.
LMI trabaja desde una premisa poderosa: el rendimiento mejora cuando la persona mejora.
Por eso, uno de los pilares del programa es la fijación de metas, entendidas no solo como objetivos, sino como un sistema para orientar la acción diaria.
Aprenderás a distinguir entre lo urgente y lo importante, un error común que limita la productividad de directivos y mandos intermedios. También trabajarás herramientas para priorizar, planificar y mantener el foco incluso en entornos con muchas interrupciones.
La metodología por bloques de tiempo te ayudará a recuperar la concentración y reducir la multitarea (una de las mayores causas de estrés y pérdida de productividad).
Desarrollar hábitos que perduren.
El programa no se queda en “hacer más cosas”, sino en hacer mejor lo que realmente importa.
Incorpora hábitos de alta productividad como la revisión semanal, la planificación consciente, la evaluación de avances y la corrección de desvíos.
El acompañamiento constante hace que los participantes mantengan la motivación y eviten abandonar los nuevos hábitos. Esto es clave, porque la productividad no es una herramienta, sino una forma de pensar y actuar.
Impacto real en equipos y organizaciones.
Cuando una persona aprende a trabajar mejor, su equipo también lo nota.
Directivos y mandos intermedios que aplican la metodología LMI se convierten en líderes más organizados, más claros y más eficaces. Esto mejora la comunicación, la delegación y la autonomía del equipo.
El impacto se traduce en reducción del estrés, aumento de motivación, mejora de resultados y equipos más comprometidos y orientados al rendimiento.
Productividad no significa trabajar más, sino trabajar con sentido.
¿Quieres llevar esta mejora a tu empresa?
Si quieres más información sobre el programa “Eficacia en la Productividad Personal”, o si deseas implantarlo en tu empresa para transformar la forma de trabajar de tus directivos y equipos, contacta conmigo y te cuento cómo adaptarlo a tus necesidades.
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