Ricardo Riveiro Lidera. Organiza. Comunica. Vende.

Dediqué mis primeros pasos en compañías multinacionales a la gestión directa de clientes y ventas. Aprendí el valor de la cercanía, de la escucha activa, de la atención al cliente, el esfuerzo diario y, en definitiva, de la orientación al cliente. Cara a cara con los clientes, comencé a comprender cómo funciona el mundo real de la venta.

Posteriormente, asumí la gestión de distribuidores y lo que ello conlleva: presupuestos comerciales, previsiones de venta... Aprendí a analizar, planificar, anticiparme y organizarme de forma eficiente. Empecé a coordinar acciones y estrategias con equipos externos y departamentos de marketing, desarrollando el pensamiento estratégico, visión de marca y análisis de mi cuenta de resultados.

Un hito decisivo en mi vida laboral fue el liderar equipos de personas. Considero que es lo más complejo y crítico que cualquiera con personas a cargo pueda realizar, independientemente de sus funciones. Gestioné funcionalmente a equipos comerciales de la distribución y jerárquicamente a mis propios equipos asignados… y posteriormente liderando a otros líderes. Entre mis funciones se encontraba el seleccionar talento, formar personas, delegar, acompañar y motivar. Me enfrenté, en estos entornos tan exigentes, a decisiones difíciles, conflictos, presión... y a la vez descubrí el valor de crear culturas de equipo fuertes y comprometidas.

Pasé a formar parte de proyectos de transformación interna, implementando herramientas (como CRMs), estandarizando procesos comerciales y diseñando el plan de formación interna para el departamento comercial y marketing. Incorporé la visión sistémica, gestión del cambio, foco en la coordinación interdepartamental y comunicación transversal.

En mi etapa de dirección y gerencia, lideré unidades de negocio, trabajando para coordinar distintos departamentos, como comercial, operaciones y administración. Supervisé la correcta gestión de rutas, márgenes y procedimientos en general. Aprendí a tomar decisiones complejas por falta de información y riesgos considerables, con visión global e inspirando desde el ejemplo, para sostener a los equipos en contextos cambiantes y nada sencillos.